Al menos dos familias reclamaron que sus hijos fueron víctimas de abuso sexual por parte de estudiantes más grandes. Fue en el Cristo Rey de Garín, que cerró por varios días.
Una grave denuncia que empezó a circular primero entre familias de una escuela del distrito bonaerense de Escobar y luego se multiplicó en toda la comunidad educativa de esa institución sumó un nuevo capítulo esta semana. Se trata de un supuesto caso de violencia de género y abuso sexual que generó conmoción entre los vecinos de ese municipio y terminó con el colegio provisoriamente cerrado por varios días.
Tras la denuncia de una madre que afirmó que su hija fue abusada por cuatro alumnos del Colegio Cristo Rey de Garín, desde el instituto emitieron un comunicado a los fines de detallar su intervención.
En la última semana, varios padres se manifestaron a raíz del episodio en las afueras del establecimiento educativo y solicitaron la suspensión momentánea de las clases, que finalmente terminó siendo anunciada para el 13 de abril.
En el nuevo comunicado se informó que se reanudarían las clases a partir del 18 de abril luego de haber “diseñado políticas de fortalecimiento, nuevas medidas de cuidado, reorganización de la jornada escolar” (se prevé que el presunto abuso haya sucedido durante la tarde, cuando tanto primaria como secundaria comparten baños en las horas extracurriculares) y estrategias de intervención orientadas a los miembros de la comunidad educativa. La nota también anunció la instalación de cámaras de seguridad.
Fue firmada en nombre de todas las autoridades del colegio, y también refirió que se encuentran investigando a disposición de las autoridades, aunque se hizo mención de un solo hecho cuando, según familiares, no habría sido el único.
A las pocas horas de hacerse público el ataque a la niña, una nueva denuncia por abuso fue radicada en la Comisaría de la Mujer y la Familia de Escobar. En esta ocasión, la presunta víctima fue un niño de cinco años que le manifestó a su psicóloga haber sido tocado en varias partes del cuerpo por un chico más grande.
“La maestra mandaba notas de que mi hijo se portaba mal y a la noche quería dormir conmigo, le daba miedo la oscuridad”, manifestó a C5N la madre del menor.
Si bien el clima en la comunidad educativa continúa siendo tenso, hubo padres que apoyaron a la institución y solicitaron prudencia, ya que las autoridades pusieron todo a disposición para que se investigue la causa. Además, refirieron que sería la primera vez que tienen conocimiento de este tipo de casos.
Las investigaciones tramitan ante la Unidad Funcional de Instrucción N°1 del Fuero Penal Juvenil de Zárate-Campana, no habiendo por el momento mayores novedades sobre el avance de la causa.