Anoche se reunió con Guzmán y Pesce. Las importaciones tocaron un récord y el BCRA oficializará un nuevo esquema automotor.
“Esta casa es peronista y de UPCN, bienvenido compañero Daniel Scioli”. Con ese mensaje en una bandera desplegada en la entrada del Ministerio de Desarrollo Productivo, será recibido este miércoles el exembajador argentino en Brasil después de asumir al frente de la cartera, en reemplazo de Matías Kulfas. El acto formal será en el Museo del Bicentenario a las 17 junto al Presidente, el gabinete, sindicalistas y empresarios.
Scioli quiere impulsar el empleo, aliviar a las pymes y ahorrar dólares en un contexto signado por las presiones cambiarias, la inflación y la pobreza. El martes a la noche, estuvo reunido con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el titular del Banco Central, Miguel Pesce, en el Palacio de Hacienda, donde analizaron la situación de las reservas. En mayo, las importaciones sumaron US$ 7.800 millones, el valor más alto desde 2011, según datos oficiales.
En las próximas horas, el BCRA oficializará una normativa por la cual las terminales le prestarán dólares a los proveedores para importar autopartes, sin depender del Central. El directorio lo definirá este jueves.
Los cambios acordados en mayo, sin embargo, no serían suficientes para evitar un freno en la actividad. Por las restricciones de los últimos dos meses, los fabricantes advierten que se están “comiendo” el cupo para importar insumos.
Pese a las exportaciones récord, Pesce sigue teniendo dificultades para acumular divisas. El martes, vendió US$ 60 millones y las importaciones de energía rondaron los US$ 150 millones. También pesa el turismo en el exterior, la deuda comercial de empresas y los pagos de deuda.
Esa dinámica llevó a Guzmán a negociar con el FMI una flexibilización de la meta de reservas en el segundo trimestre, a cambio de revertirlo en lo que resta del año.
En ese marco, el flamante ministro buscará alentar exportaciones procurando ahorrar divisas y mantener el superávit comercial, que este año se redujo un 30%, en sintonía con el reclamo de Cristina Kirchner a Techint y el gobierno.
Para ello, mantendrá en sus puestos a los principales funcionarios de la gestión de Kulfas y en la secretaría de Industria, a Ariel Schale, un éxtécnico de la fundación textil Protejer.
Ese resorte, junto al Banco Central, Economía y AFIP, administra las importaciones mediante una maraña de controles, incluidas las licencias y permisos. “Un fuerte de Daniel es su experiencia en Brasil en comercio exterior. No se debe importar sin exportar, tiene que haber equilibrio, sería lo ideal, no tendría que haber disparidad entre ingresos y egresos, sino el país se endeuda”, señaló un allegado.
El desembarco genera expectativas en el empresariado. En Brasilia, Scioli inició un raid de reuniones con multinacionales, de las cuales se llevó anuncios de inversión y promesas de empleo.
Hubo fotos con Dow, Electrolux, General Motors, Havaianas, Whirpool y los fabricantes de autos de Brasil (Anfavea). Y en su despedida, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, le dispensó elogios. Un vínculo que nunca lograron Alberto y Cristina con el principal socio comercial.
“La idea es articular con los equipos técnicos, se lo ve bien a Scioli“, señalaron en la UIA, donde ya iniciaron conversaciones. El funcionario pondrá énfasis en las pyme, sin despreciar a la central fabril, con la cual mantiene buena relación.
“Va a hacer todo lo contrario a fijar restricciones. Es muy bueno para el sector que esté en esta posición, venimos trabajando las automotrices muy bien desde que tomó la embajada en Brasil”, aseguraron en una terminal.
El exgobernador no será un cuatro de copas en el gabinete. Por el contrario, en su círculo evalúan un menú de iniciativas orientadas a las pyme que incumben al Ministerio de Trabajo, AFIP y ANSES.
Es el caso de una propuesta para regularizar empleo y convertir planes en trabajo genuino sin perder la ayuda estatal. El incentivo podría ser una condonación de la deuda de seguridad social a las empresas si mantienen el personal regularizado. Habrá que ver.
Scioli ve en las pyme el principal motor del empleo (un 75% en el sector formal y más aún entre los no registrados). Según sus colaboradores, en sus 8 años de gestión en la Provincia cuadruplicó los parques industriales y tejió lazos estrechos con el sector. Intentará aprovechar esa experiencia, sumada a su networking en Brasilia. Una proyección con pretensiones presidenciales que se superpone con las aspiraciones y el perfil de Sergio Massa.