Así lo dijo Pablo Moyano, uno de sus cotitulares, pero su par Héctor Daer aseguró que se movilizarán “para interpelar a la política en su conjunto”. Se desechó marchar ante entidades empresariales, como querían moyanistas y kirchneristas
La Confederación General del Trabajo (CGT) ratificó la marcha del 17 de agosto en medio de la preocupación por el agravamiento de la crisis económica, pero la protesta “no será en favor ni en contra del Gobierno”, como dijo Pablo Moyano (Camioneros), sino para “interpelar a la política en su conjunto” porque fue la que originó esta situación, según precisó Héctor Daer (Sanidad).
“Estamos hablando de toda la política. No se trata de mala praxis o buena praxis del Gobierno. La única verdad es la realidad: anten este cuadro, la política tiene que encontrar la salida en su conjunto. Porque las responsabilidades son conjuntas”, destacó Daer.
Luego de un intenso debate de unas cuatro horas, el Consejo Directivo de la CGT confirmó esta tarde la decisión que había tomado su mesa chica, sin el moyanismo ni el kirchnerismo de la Corriente Federal, y la movilización se hará desde el Obelisco hasta la Plaza de los Dos Congresos, sin acto ni oradores, y con la difusión de un documento que se está elaborando.
La mayoría de la dirigencia cegetista, que se reunió en la sede de Azopardo 802, desechó una propuesta de Pablo Moyano y de Sergio Palazzo (bancarios) de marchar ante las entidades empresariales para responsabilizarlas por el aumento de los precios y la inflación. Sin embargo, en una conferencia de prensa, el dirigente de Camioneros advirtió que se movilizarán “contra los especuladores: acá el responsable es AEA, que es la asociación de empresarios argentinos, esa banda de forajidos son los que están quitándole un plato de comida a los trabajadores”.
La discusión de los sindicalistas sobre las características de la marcha estuvo plagada de diferencias sobre a quiénes apuntar como responsables de la crisis económica, aunque la enorme preocupación por la posibilidad de estallidos sociales o la renuncia de Alberto Fernández llevaron a no cargar las tintas contra el Gobierno y sí, en cambio, apuntar a “la política” en general y a “los sectores que desestabilizan y especulan”, como luego dijo Daer sin brindar ninguna precisión.
En la dirigencia de la CGT hay mucha inquietud por un video de Aldo Rico que circula en las redes, compartido en el WhatsApp de la conducción cegetista, en el que el militar carapintada llama a los veteranos de las Fuerzas Armadas a movilizarse con un discurso “golpista”, como advirtieron en la central obrera, ya que reclama “actuar” para que “no se llegue a la disolución nacional” y afirma que “cuando la patria está en peligro, todo es lícito, menos dejarla perecer”.
En medio de este clima, cada uno de los presentes en el cuarto piso de Azopardo 802 pudo hablar en tono de catarsis acerca de cómo la inflación, el aumento de los precios y el alza del dólar castiga a los trabajadores, aunque, más allá de los matices, la conclusión fue que no debían apuntar a Alberto Fernández ni Cristina Kirchner para convocar a la marcha del 17 de agosto sino a toda la clase política que, como definió la CGT, es la “responsable” de la actual crisis socioeconómica.
“El gobierno electo democráticamente no puede ser atacado por especulaciones políticas y económicas que van en busca de una devaluación y suba de tarifas, que lo único que va a generar es mayor pobreza en los argentinos”, resaltó Daer en la conferencia de prensa. Carlos Acuña (estaciones de servicio), el otro cotitular de la CGT, hizo hincapié en que “todos los gobiernos tienen responsabilidad” y acusó a “los sectores económicos que están jugando a la política”.
Pablo Moyano, a su turno, hizo malabares para contestar si apoyaba las declaraciones de su papá, Hugo Moyano, en el sentido de que la marcha del 17 de agosto “es en apoyo del Gobierno”. Su definición fue: “No es ni a favor ni en contra del Gobierno. Es para defender las paritarias libres, el trabajo digno que han conseguido los trabajadores a través de la lucha”.
Sin embargo, agregó: “Por supuesto que el gobierno nacional cometió y comete errores. Uno de los errores es no haber tenido la fortaleza para sentar a estos tipos (por los empresarios) en una mesa y decirles: déjense de joder con el salario y con la comida de los argentinos”.
“Nuestro gobierno es Alberto y Cristina y los vamos a defender hasta el último día de su mandato. Lo que tengamos que decirle al Presidente sobre lo que creemos que está fallando, se lo diremos a él”, finalizó el dirigente de Camioneros.