Benjamín Zucarelli fue muerto a tiros por delincuentes en la zona de Rafael Castillo. Hay dos detenidos
Ayer por la tarde 23 años, Nazareno Benjamín Zucarelli, oficial de la Policía Bonaerense, fue asesinado a tirospor delincuentes cuando junto a por lo menos una compañera identificaron una posible actividad sospechosa en un descampado de Rafael Casillo, localidad del partido La Matanza. Según informaron fuentes policiales, los oficiales monitoreaban la zona, un terreno de 10 hectáreas adyacente a un cementerio, en una zona donde se repiten los predios tomados, cuando le pidieron a un grupo de personas identificarse.
Al escuchar la voz de alto, los delincuentes inmediatamente atacaron con disparos de armas de fuego. Uno de sus compañeros también resultó herido.
El caso se viralizó de inmediato entre policías de la fuerza, que se transmitían el relato a través de grupos de WhatsApp donde las historias de agresiones a policías de la Bonaerense se repiten, como el ataque a una miembro de la fuerza atacada a golpes y desarmada en una garita de Morón dos semanas atrás. Entre el relato se incluían las modulaciones de los efectivos, que son parte de esta nota. Las conversaciones entre ellos son evidentes: más que nunca, los hombres y mujeres de la Bonaerense sienten la inseguridad.
Hay dos detenidos por el caso, investigado por el fiscal Marcos Borghi, de la UFI de Homicidios de La Matanza. El Ministerio de Seguridad los identificó como Juan Manuel Aguirre, alias “Juanchi”, de 28 años y E.M, cuya edad se encontraba en proceso de certificación. Se identificaron luego otros dos sospechosos más. Se realizaron allanamientos donde se encontraron un chaleco antibalas y una pistola Bersa calibre 9 milímetros.
Los compañeros del policía muerto declararon en una comisaría. Fuentes judiciales confirmaron a este medio que Zucarelli efectivamente no se encontraba realizando tareas de investigación enviado por una fiscalía, sino tareas rutinarias de prevención aunque no se descarta que los sospechosos se dedicaran al narcotráfico.
En paralelo, Esmeralda, pareja de Torres, de 22 años, también policía, realizó un fuerte reclamo en Facebook para pedir justicia. Apeló, precisamente, a quien acompañaba a Benjamín en el móvil.
“Necesito saber la verdad. ¿Quién era la compañera que estaba con Benja en el móvil? Benjamín fue el único herido donde estaban los supuestamente cinco que estaban en el móvil con él. ¿Por qué mienten, porque juegan con la vida de la gente? ¿Es verdad que somos un número más y que no les importa una mierda nada ni la memoria de Benjamín, el chico más bueno que había en este mundo? Necesito saber quién estaba en el móvil con él, seguro estás leyendo esto por favor enviame un mensaje”, escribió en su muro de Facebook.
Esmeralda continuó: “Todo es una mentira, nos mintieron en la cara, Benjamín estaba solo en el móvil con una compañera, bajó a intervenir una venta de droga. Su compañera se quedó en el móvil y lo agarraron de atrás, lo entraron arrastrando como un perro a la villa, le metieron 4 balazos, le sacaron el arma y el chaleco antibalas. Su compañera se asustó y se fue, le hicieron una emboscada mi Benja”.
Fuentes del caso no pueden confirmar que lo que Zucarelli interceptó se tratara de una jugada narco. Sin embargo, no lo descartan. Fuentes policiales aseguran que está “descartado” que la pistola y el chaleco incautados perteneciaran a la víctima.
Torres, contó en su relato, estaba en pareja con Zucarelli desde los 14 y planeaban mudarse juntos.